Capítulo 1: Palomita Blanca, vidalita de pico rosado.
María está muy enamorada de Juan Carlos. Nos cuenta los sucesos que la llevaron a conocerlo junto a su infaltable amiga Telma. Esto ocurre cuando ambas asisten a un festival en Los Dominicos con la ayuda de Juan Carlos que las transporta hacia el lugar en su auto, sin embargo en ese momento era un desconocido. Al llegar, varias personas de clase alta se acercaron a ellas, y Telma fue adulada por uno de ellos al ser ésta más extrovertida, el cual tenía un aspecto parecido al Che Guevara según la protagonista.
Capítulo 2: Antes te cantaba, vidalita como enamorada.
Cuando ya estaba atardeciendo, ambas chicas fueron disfrutando del festival, por sobretodo Telma que estaba muy divertida con todo lo que había. Se fueron acercando a varios grupos, ya que andaban solas; bailaron, gozaron de la música y luego al anochecer se dirigieron a una fogata junto a unos jóvenes que le convidaron café y una manta a María. Al otro día ella decidió irse sola, al estar enojada por el comportamiento que había tenido Telma la noche anterior. En su camino se encontró con Juan Carlos y se fue con él en su vehículo, sin saber dónde se dirigía, fueron a la casa de él y luego al mar.
Capítulo 3: Palomita linda, vidalita palomita triste.
De camino a la playa a mucha velocidad, pasaron a un lugar a comer, debido a que María tenía mucha hambre, pero Juan Carlos no comió con ella. Después llegaron a la playa de Reñaca y durmieron por un rato abrazados. Al despertar hacía mucho calor y Juan Carlos quiso bañarse, por lo que decidió ir a Concón, llegaron a una playa muy larga, donde no habían muchas personas, estaban casi solos, al bajarse del auto se desnudaron y se fueron a mojar, en ese momento él chico aprovechó de incorporarla a su religión llamada “Silo”, mediante alabanzas al Sol realizando acciones de pureza como desnudarse y abrazarse sin caer en el pecado carnal. María al estar muy atraída por él lo aceptó todo. Durante todo este viaje se conocieron un poco más al hablar de sus familias y de sus estudios. Cuando ya era tarde, ambos tuvieron hambre y se destinaron a casa de Juan Carlos quien le convidó de comer.
Capítulo 4: Qué poco te queda, vidalita de lo que antes fuiste.
Mientras comían, una empleada de Juan Carlos llamada Rosalinda comenzó a regañarlo por no haber llegado a la casa el día anterior. María como quería saber mucho sobre él le hacía preguntas sobre su familia y trataba de grabar en su mente cada espacio del dormitorio de su amado. Seguidamente la fue a dejar a su casa ya que él debía ir a darle explicaciones a su madre. Al llegar a su casa su madrina también la reprendió al llegar a esas horas a su casa. Pasó más de un mes después de la carta que le envió Juan Carlos para decirle que guardara en secreto todo sobre “Silo”. Por consiguiente llegó su madre ebria con sus hermanos Lalo y “el Porotito”, diciéndole que vuelva a casa, gritándole vulgaridades. Por esta razón su madrina la expulsó de la casa por la fuerza.
Capítulo 5: Palomita flaca, vidalita de piquito hambriento.
Comenzaba la elección de un nuevo presidente después de seis años. Había una disputa entre el candidato Salvador Allende y Jorge Alessandri, por lo cual la madrina de María era seguidora del segundo ya nombrado y por el contrario su mamá seguía la candidatura Allendista, participando de manifestaciones junto a sus nueve hijos , además de obligar a ir a su hija. María odiaba acompañarla, pero si creía en lo que su madre le decía sobre los beneficios que podría traerle.
Su madrina le contaba lo bueno que había sido para ellos estar bajo el mando de J. Alessandri mientras estaba vivo su marido fallecido, pero María por llevarle la contraria, decía seguir a Allende junto a su amiga Mirta Soto. Últimamente le estaban sucediendo muchas cosas malas a ella y a toda su familia, incluso había llegado a pensar en querer morir. Una tarde le llegó una carta de Juan Carlos diciéndole que se reunieran.
Capítulo 6: "Todas las plumas, vidalita te las llevó el viento"
Este capítulo habla de cómo María no podía ni dormir, ya que Juan Carlos ni siquiera había firmado su carta, ni le había puesto María. Durmió mal, pero tenía que ir al colegio por lo que se vistió rápido y fue desayunando en el camino. Llego tarde así que se llevó su primera anotación y se sacó un 0 en una prueba, ya que no dejaba de pensar en Juan Carlos. Después del colegio, se fue a su casa con Mirta, y se vistió linda y se puso a esperar a Juan Carlos quien venía en un gran auto. Fueron a ver a "Bruno" y había algunas personas con túnicas, entre ellos un viejo enfermo, que daba gritos extraños y Bruno decía que rezaran por el viejo. Después se hizo de noche, Bruno se le acerca a María y le pregunta si acaso cree, y María responde que sí, también le pregunta si es pura, si es virgen, una pregunta bastante incómoda para María, por el suceso con su padrastro. Luego se va con Juan Carlos en su auto, y él le habla acerca de una prueba que la dejara pura, pero que tiene que ser sincera, la prueba consiste en hacer lo que más le avergüenza. En ese momento, María le pregunta a Juan Carlos si acaso Silo era real, quien al parecer se lo toma a mal.
Capítulo 7: "Es un viento malo vidalita, es un viento frio"
Al día siguiente de lo ocurrido anteriormente, María le cuenta a Mirta todo lo que había pasado, y ella le dijo que era una locura, que ella nunca siquiera había escuchado hablar de Silo, y que en esa supuesta prueba quizás le harían alguna cochinada.
Ya estaban a finales de Agosto, y el único tema del cual hablaban todos era de las próximas elecciones, agregando que la madrina de María rogaba para que saliera Alessandri. También se realizaban concentraciones, y en una de ellas María conoce a un joven comunista, René, el cual no se le despagaba de su lado ni dejaba de mirarla. Además era época llena de protestas, y efervescencia social, y la población donde vivía María todos andaban con banderas y letreros apoyando a Allende. Después cuando ya quedaba una semana para las elecciones, María tenía que pegar letreros en la población, y una día se entera que Juan Carlos la había ido a buscar pero ella no estaba, y pensó que ya no lo vería más, pero un día Juan Carlos la fue a buscar y fueron a "las terrazas" y hablaron sobre por quien iban a votar, María respondió que no sabía, y Juan Carlos no apoyaba a nadie, dijo que todos eran impuros. En ese momento, llegaron varios jóvenes, al parecer amigos de Juan Carlos, y María se sentía incomoda, pero los jóvenes la trataron como si fuera una del grupo. Después llego José Luis, hermano de Juan Carlos, y realizo un comentario que le molesto a María, tratándola de "negra". Sin embargo lo que más le molesto fue que Juan Carlos se parara y se fuera con los jóvenes, y la dejara en providencia, sin siquiera plata para devolverse a su casa.
Capítulo 8: "Te dejó sin plumas, vidalita y el buche vacío"
En ese capítulo se cuenta de que María le vuelve a contar lo sucedido a su amiga Mirta, y ella como consejo le da que Juan Carlos no le conviene, que a lo mejor él ni siquiera estaba interesado en María, porque nunca le ha preguntado si quería pololear. Pero María en su defensa dice que Juan Carlos es religioso. Posteriormente, va a ver a Telma y le cuenta lo sucedido, y esta le dice que no sea tonta, que aproveche, que era buen partido, pero que no se entregara sexualmente, que a ella tenía una mala experiencia en ese sentido.
Al siguiente día llego Juan Carlos a buscarla con dos amigos de Silo, y fueron a Providencia e iban con unas bolsas, cuando llegaron al muro que da al Mapocho abrieron una bolsa, en la cual habían piedras, y empezaron a tirarlas, llegando a romperle la cabeza a alguien, y después Juan Carlos saca una pistola y disparo, y se fueron corriendo.
Ulteriormente, María seguía sin dormir, y no paraba de pensar en él, incluso rezaba para no perder a Juan Carlos. Ahora las concentraciones eran masivas, y más cuando Allende fue a la población, y la madre de María que apoyaba a Allende estaba borracha, y el porotito se encontraba enfermo, y María preocupada trataba de hacer algo pero su madre no la dejaba ya que decía que lo habían "ojeado los momios”. Pero finalmente lo pudieron llevar a la posta y el diagnostico decía que al parecer era por consumir unos fideos crudos.
Capítulo 9: "Palomita sonsa, vidalita de piquito bobo"
Después de lo ocurrido con porotito, María andaba desanimada, pero estaba leyendo un libro de Corín Tellado y se sentía identificada con los personajes y pensaba que eran ella y Juan Carlos. En la radio todo era política, y empezaron a dar los resultados de las esperadas elecciones, todos muy nerviosos y atentos, la madrina de María encendió hasta velas, rezando para que no saliera Allende, sin embargo a María le agradaba Allende, ya que como ellas eran pobres, Allende podría ayudarlas, hasta que dieron los resultados, y el nuevo presidente de Chile, era Salvador Allende, es la población todos estaban celebrando, aunque su madrina no quiso seguir, y María, se quedó pensando en Juan Carlos.
Capítulo 10: "Cuida de tu nido, vidalita que anda suelto el lobo"
En este capítulo se relata que después de 2 semanas de que haya salido Allende como presidente, María se junta con Juan Carlos, quien se encontraba bastante inquieto por la noticia, contándole a María que llegarían los militares, que su padre estaba en Nueva York y estaba vendiendo todo, y que Silo debía actuar porque todos los candidatos eran impuros. Después se van a "las terrazas" y llegaron sus amigos, y José Luis, y este la trato de negra, Allendista y de ordinaria haciéndola sentir inferior nuevamente a María pero esta vez Juan Carlos la defendió, lo que hizo sentir muy feliz a María.
Al día siguiente María al llegar del colegio se encuentra con Juan Carlos quien la estaba esperando, y se fueron a conversar, donde él le revela que era distinto a su familia, quienes andaban muertos de miedo por el nuevo presidente que hasta incluso podrían irse del país, situación que lo ponía en problemas ya que no quería dejar a Silo. En esa conversación, también le revela que era virgen, poniendo en una situación incómoda a María, pero él no le hizo esa pregunta, tomo su mano y la agarro fuerte, y comenzó a besar sus dedos, y María, le daba gracias a la Virgen.
Capítulo 11: Pobre Palomita, vidalita de vuelo perdido.
En este capítulo ya es mediado de Octubre en donde Juan Carlos, casi todos los días pasaba a buscar a María e iban al “Copelia” y a la disco en la que trabaja la hermana de él, pero en estas salidos Juan Carlos empezó con unos raros cambios de ánimo.
Un día viernes, en el cual María no había ido al colegio, Juan Carlos la pasó a buscar temprano y luego fueron a las “Terrazas” que se encontraban al frente del “Copelia” en donde su grupo de amigos se juntaban para pasarla bien. Luego de salir de las “Terrazas” fueron a los jardines que se encontraban al lado del río Mapacho, pero esta celebración fue interrumpido por un chico que les dijo que tenían que salir de ahí y todos los que estaban en ese lugar salieron corriendo de ahí.
Capítulo 12: Si no le hace frente, vidalita te deshace el nido.
En este capítulo María comienza contando que el mes de Octubre paso muy rápido, y que ve a su madrina encerrada escuchando la radio en donde dan la Parada Militar y los discursos de Allende. María no ha tenido noticias de Juan Carlos, además de que su madre cada vez le traía más problemas, ya que ella y sus hermanos se estaban muriendo de hambre y que Don Beno había desaparecido.
Un día vio el a Juan Carlo, y él lo llevo a pasear por Las Condes y por La Dehesa. Durante el camino María le había preguntado que en donde había estado, él le respondió que andaba en Zapallar con su familia. Luego de haber hablado por un momento más, fueron al Club de Golf en donde la pasaron muy bien, pero después volvieron a Providencia en donde se juntaron con los amigos de Juan Carlos.
Antes de despedirse Juan Carlos le dice a María que se va a ir de viaje pero que no le puede decir a donde, ya que Silo los ha llamado.
Capítulo 13: Palomita linda, vidalita palomita fea.
Después de tres días María volvió a ver a Juan Carlos, pero él no era el mismo, ya que, además de cambiar un poco físicamente, también en su estados de ánimo, ya que María le había preguntado cómo le había ido y este le respondió muy groseramente, diciéndole que se metiera en sus asuntos y que no fuera intrusa.
Luego de esa pequeña discusión no hablaron más hasta que se pararon en un potrero que quedaba antes de entrar a un túnel pasado Pudahuel, en donde vieron pasar unos aviones y de un momento a otro Juan Carlos se puso a llorar, pero de un momento a otro corrió al rio, para después ir donde María y decirle que se tenían que ir, pero antes diciéndole que Silo ya no existía.
Capítulo 14: Apronta el piquito, vidalita para la pelea.
Parte es capítulo contando el momento en el que ella llego a la población en donde vivía junto con su madrina, recordaba que en Septiembre y Octubre le parecían los mejores meses del año, en donde veía que todo se llenaba de color y de cultura, como lo eran los gitanos.
María pasaba su todo el día encerrada en su casa sufriendo por Juan Carlos. Un día Juan Carlos le hizo entender a ella que él había estado en Mendoza con Bruno. Pero él había empezado con sus cambios de humor cada vez ´peores que hasta ella le había rezado a la Virgen para que lo ayudara. Y como todos los días Juan Carlos pasaba a buscar a María para salir en la noche. Hasta que un día en un café parecido a “Las Terrazas” en donde Juan Carlos golpeaba a su hermano.
Luego de esa pequeña pelea todos fueron al río en donde ellos seguían con su “fiesta”, en donde Juan Carlos le empieza a decir que él no tenía familia ya que toda su familia era de alguna ideología política, en cambio él solo creía en el Silo. Después de esa pequeña plática que tuvieron Juan Carlos dijo que lo mejor era que fueran a la Costanera.
Capítulo 15: Palomita enferma, vidalita de alita quebrada.
El capítulo parte con que María cuenta que Juan Carlos la había invitado a bailar, así que la Telma la estaba ayudando a ver con que ropa iba a ir.
Juan Carlos había llegado como a las nueve, y fueron a Vitacura, en donde había una fiesta, en donde estaban todos sus amigos. Pero después de un rato ellos se fueron a “Las Catacumbas” que estaban por Santo Domingo, en donde también había una fiesta bien elegante. Mientras ellos bailaban Juan Carlos se atrevió a besar a María.
Capítulo 16: Si no sacas fuerzas, vidalita te quedas sin nada.
María, tras haber soñado con Juan Carlos lo espera con ansias, pero no sabe nada de el, su madre llega a la casa de su madrina, la cual la acepta (debido a que está sobria) a pesar de haber prometido que no lo haría, y comienza a hablar de Allende y de la justicia, lo que le hace rememorar su violación por Don Beno y la muerte del Porotito. La tarde del viernes Juan Carlos pasa por ella y la lleva a tomar helados y a conocer a sus padres.
Capítulo 17: Palomita negra, vidalita de piquito rojo.
Juan Carlos y María van a una fiesta en el Club del Golf, en donde luego Juan Carlos la guía a una casita tomandola de la mano, a lo que finalmente se envuelven en una frazada y María descubre las intenciones de Juan Carlos.
Capítulo 18: Crece palomita, vidalita sácale los ojos.
Juan Carlos se comporta en forma agresiva y violenta, tanto con María como con las amigas de éste, insultandolas y tratandolas mal, esto entristece a María
Capítulo 19:
Juan Carlos lleva su auto al mecánico mientras María y Telma salen, María se siente muy mal debido a la pelea que tuvo con Juan Carlos, quien la deja sola, su amiga la consuela, luego toma una micro equivocada por lo que debe caminar a su casa.
Luego los jóvenes vuelven a discutir, pero Juan Carlos se disculpa.
Capítulo 20:
María se entera de que Juan Carlos participó en la muerte de el General Schneider y es buscado por asesinato, tras cumplir 17 años se despide de este y comienza a trabajar en la paquetería de don Frenando Awad.
